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En algunas columnas he tenido éxito, otras fueron polémicas y tuve la razón en muchas. En otras me equivoqué, pero aquí están para que todos las revisen, las comenten y las critiquen.

lunes, octubre 09, 2006

¿Está emulando a Pastrana el presidente Uribe?


Una de las banderas de la primera campaña presidencial del doctor Uribe fue la seguridad democrática, su discurso se centró en la guerra frontal a la guerrilla y a la consecución de la paz a través de la vía armada. Es decir guerra total para parar la guerra. ¡Vaya paradoja!

El discurso convenció a la inmensa mayoría que terminó eligiéndolo para que después del fracaso del Caguán, se acabara de una vez por todas con las Farc y se le diera la estocada final a un conflicto interno de más de cincuenta años.

Convertido en un héroe nacional, Uribe invirtió millonadas en la Fuerza Pública, destinó del presupuesto nacional un gran porcentaje a mejorar las condiciones de los militares y de la policía y a equiparlos con mejor armamento y mejores herramientas para el combate.

Luego de estos cuatro primeros años, lo que se hubiera podido invertir en salud y educación, se perdió por cuanto los resultados esperados aún no se ven, ni se vislumbran por ningún lado.

Ahora, en los albores de un nuevo mandato, le dio al presidente Uribe por negociar y si es el caso, reunirse con “Tirofijo” o con Raúl Reyes, quizás con ganas de tomarse también una “fotito” muy abrazado con alguno de los dos.

Lo del abrazo pues es lo de menos, lo que realmente no encaja dentro de lo que ha pretendido mostrar nuestro mandatario es que haya criticado vehementemente a su antecesor y ahora esté a punto de hacer lo mismo.

Tal vez Pastrana tenía la razón, pero nadie le entendió. Acabar con la guerra a punta de balas es un error craso que termina deteriorando todavía más las condiciones de vida de la población civil.

El único camino sano es el diálogo del cual deben surgir las condiciones para que realmente haya justicia social en este país, lo que a la postre repercutiría en una paz sólida y permanente.

¿Se dio cuenta Álvaro Uribe que a Pastrana, pese a sus errores en otros frentes, se le engañó pero que sus intenciones eran buenas?. ¿Recapacitó y entendió que matándonos entre todos no podemos construir nunca un país mejor?

Ojalá en estos próximos cuatro años también caiga en la cuenta de lo esencial que es invertir en educación, de lo justo que es darle a la ciudadanía unas buenas condiciones laborales y también unos servicios de salud dignos, de lo importante que es pensar en cómo se redistribuye la riqueza y de lo fundamental que sería, de verdad, combatir la corrupción y el clientelismo, los cuales también prometió erradicar pero a los que está, según hechos recientes, entregado en cuerpo y alma.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es cierto